La correcta circulación de nuestra sangre es un aspecto fundamental de nuestra salud. Cuando esta falla, se generan problemas de coagulación, que dan lugar a la aparición de varices o venas más hinchadas de lo normal.
Esto puede llegar a ser un gran problema a largo plazo, no solo por lo incómodas que son a nivel estético, sino porque también pueden llegar a producirnos problemas médicos graves como una trombosis venosa profunda o un accidente cardiovascular.
Por suerte, para tratar todos estos problemas venosos de raíz existe la flebología estética. En la clínica Park Castellar somos especialistas en tratamientos corporales de este tipo, que cuidan por la salud de tu cuerpo a la vez que miramos por tu estética.
Esta intervención, especialmente recomendada para personas de edad avanzada, se ha convertido en uno de los tratamientos más demandados de la clínica para tratar varices y venas hinchadas.
En la clínica Park Castellar estudiaremos tu caso de forma exhaustiva para ver todas las posibilidades de tratamiento de las que dispones y ofrecerte siempre la solución que mejor se adapte a tus necesidades.
¿Qué es la flebología estética?
La flebología es una especialidad médica dedicada al estudio de la anatomía y fisiología de las venas superficiales y profundas del cuerpo, así como sus principales patologías, incluyendo las varices.
En la clínica Park Castellar tratamos las venas varicosas desde un punto de vista médico, con nuestro equipo profesional especializado, pero también tratamos de ofrecerte una solución estética, que te permita sentirte a gusto con las zonas de tu cuerpo en las que antes se acumulan estas varices.
La flebología estética agrupa diferentes tratamientos que se encargan de eliminar las varicosidades. Entre ellos, disponemos de inyecciones de productos esclerosantes, pero también de otros tratamientos basados en la utilización de un láser vascular.
Según nuestras necesidades podemos utilizar un tipo de intervención u otra, siempre buscando aquella que mejores resultados nos ofrezca.
¿Cuál es el mejor tratamiento?
Actualmente, la fleboesclerosis con microespuma es el tratamiento más eficaz e innovador para las varices y las úlceras crónicas de las extremidades inferiores. Nos permite tratar cualquier tipo de varices, sin producir apenas molestias, ni requerir hospitalización. De esta forma mejoramos la circulación venosa y el paciente vuelve a casa sin necesidad de reposo.
En cualquier caso, dependiendo de nuestra situación y el tipo de varices que presentemos, nos puede venir mejor cualquier tipo de tratamiento. En la clínica Park Castellar somos especialistas en todos ellos, tratando de buscar siempre el que mejor se adapte a tus necesidades.
¿Qué tipos de tratamientos realizamos?
En el Centro Médico y Estético Park Castellar realizamos diferentes tratamientos y técnicas para erradicar las varices como escleroterapia, laserterapia, presoterapia, hidroterapia y ozonoterapia, drenaje linfático y ultrasonidos.
Escleroterapia
La escleroterapia se encarga de eliminar las venas varicosas y esas “arañitas” tan molestas estéticamente. Es el tratamiento que más efectividad presenta para todas aquellas varices de pequeño tamaño.
Con la escleroterapia inyectamos una solución esclerosante que va directa a nuestras venas. Esta sustancia tiene la función de hacer cicatrizar la vena, de modo que la sangre se irá hacia otras venas más sanas.
El efecto que conseguimos con esto es que la vena que ha colapsado sea reabsorbida por nuestro cuerpo y que termine desapareciendo en poco tiempo. De esta manera conseguimos un efecto tanto estético como saludable.
Las venas más pequeñas suelen desaparecer en un par de semanas. Sin embargo, para varices de mayor tamaño es posible que necesitemos más tiempo e incluso varias sesiones. Siempre podemos probar otros tratamientos de los que ofrecemos en la clínica.
Laserterapia
La laserterapia transcutánea es un tipo de tratamiento basado en el uso de láser para eliminar todas esas varices consideradas como estéticas. El láser se encarga de atacar las varices de forma selectiva, de forma que estas coagulen, se desnaturalicen y sean absorbidas por nuestro cuerpo para terminar desapareciendo.
Este tratamiento sólo funciona con aquellas varices de carácter superficial. La parte más positiva de este tratamiento es que no es doloroso y no requiere de inyecciones ni punciones de ningún tipo. Es perfecto para todos aquellos pacientes con miedo al dolor o con fobia a las agujas.
Presoterapia
Con la presoterapia aplicamos un masaje con una presión controlada en varias zonas del cuerpo. Utilizamos una maquinaria con tubos con cámaras de aire independientes, que son las encargadas de realizar los masajes.
Inflamos y desinflamos las diferentes cámaras de aire, las cuales aplican una compresión directa sobre nuestra piel, de forma suave y firme.
Con este tipo de masaje podemos estimular el drenaje linfático, pero la principal característica de este tratamiento son los beneficios que presenta sobre el sistema circulatorio. Prevenimos problemas sanguíneos a la vez que eliminamos las varices pequeñas.
Hidroterapia
La hidroterapia es, sin duda, una de las terapias alternativas más sencillas y efectivas de utilizar. Solamente necesitamos agua, la cual aplicaremos siempre con diferentes configuraciones de temperatura o de presión ejercida. Con esta técnica mejoramos la circulación, eliminamos varices superficiales y en general mejoramos nuestro bienestar.
En la hidroterapia se suelen alternar los usos de agua caliente y agua fría, para conseguir diferentes efectos beneficiosos en poco tiempo. Mientras que el agua caliente ayuda a la dilatación de los vasos sanguíneos, lo cual facilita la circulación de la sangre, el agua fría hace que los vasos sanguíneos se contraigan, eliminando las venas varicosas.
Ozonoterapia
Con el ozono mejoramos enormemente el flujo sanguíneo de nuestros vasos, ya que se vuelven más permeables y la sangre se oxigena en mayor medida. Mejoramos también la función vascular, haciendo que las varices pierdan su color violeta y recuperen el tono rosado habitual de la sangre que se encuentra en buen estado de oxigenación.
Este tratamiento es muy efectivo a largo plazo, ya que oxigenando la sangre hacemos que esta no necesite buscar caminos alternativos. Detenemos de forma radical la formación de venas varicosas y eliminamos también todas las posibles complicaciones que pueden ocasionar la presencia de las mismas.
